APRENDER A PERDONAR

Un hecho con el cual podemos verificar que estamos creciendo espiritualmente, como persona y evolucionando positivamente es ver que sabemos perdonar, que lo aplicamos y que sale de nosotros mismos sin ningún tipo de esfuerzo y de manera natural; ya que si es forzado y sin sentirlo realmente (tenemos la intención, que es un primer paso, pero no lo sentimos), no es más que una máscara que nos ponemos al perdonar y al no sentirlo realmente, en cualquier momento podemos explotar.

Perdonar significa aceptar un hecho, una situación o una persona tal y como es, como ha sucedido y no tomar acciones negativas al respecto (enfado, venganza, frustración, etc.).

A la primera persona que tenemos que aprender a perdonar es a nosotros mismos. Muchas personas somos muy autoexigentes con nosotros mismos y constantemente nos estamos castigando por como creemos que tendríamos que haber hecho una cosa o cómo deberíamos actuar frente a una situación y nos culpamos constantemente. Y es que eso no quiere decir que tengamos que aceptar y resignarnos si algo no nos gusta. Tenemos que aceptar, perdonar y actuar si depende de nosotros y podemos mejorar.

También es necesario aprender a perdonar a las demás personas. En la vida nos cruzamos con personas que nos decepcionan, nos traicionan y nos mienten, en definitiva, que nos hacen daño. Te invito a hacer un ejercicio de autoconsciencia. Piensa en tu vida, seguro que hay alguien que en algún momento te ha hecho daño de una forma u otra. Tus padres, tu hijo, tu amiga, tu expareja, tu jefe, etc. Entonces ahora piensa en el daño que te ha hecho esa persona, la situación por la cual te sentiste engañado, traicionado o abandonado, por ejemplo. ¿Has perdonado de verdad a esa persona? ¿O por el contrario los sentimientos que han aflorado ahora han sido la rabia o el dolor? Si no sientes nada negativo ahora, has perdonado, enhorabuena. Si por el contrario son sentimientos negativos los que te salen al pensar en ello, es que realmente no has perdonado. No te tortures, no pasa nada, solo es porque aún no has aprendido a perdonar a esa persona.

Y es que este un paso muy importante para llegar a nuestra paz interior y felicidad: perdonarnos a nosotros mismos y a los demás. Sentirnos en paz con esa situación que nos dañó en su momento. Eliminar los sentimientos de dolor de nuestro subconsciente. Y eso significa, aceptar la situación, perdonar y aprender de ello para crecer y evolucionar como persona.

VivirEvolucionando.

vivirevolucionando.com




 

Comentarios

Entradas populares de este blog

DAR SIN ESPERAR NADA A CAMBIO

3 cosas que NO TE ENSEÑAN EN LA ESCUELA

CALMAR LA MENTE